Extracto del libro de ediciones Muskari
"Huellas y rastros de los mamíferos ibéricos"
TEJÓN
(Meles meles)
Tejo, careto, tajón,
tajudo, tesugo, teixó, teixugo, porco teixon, tasugo, tourón, teijo, tijón,
azkonarra, azkonar, azkenarro, melón, tachón, tachubo, tajugo, tejudo, tafú,
tachugo, melandro, melandru, oso enano, texugo.
De los miembros de la
familia de los mustélidos el tejón es el de más amplios recursos, capaz de
comer cualquier cosa, en este sentido es un omnívoro.
Está presente en toda
la península sin despreciar ni los secos Monegros ni los collados a 2000m de
altura. Además de ocupar todo el territorio es un animal abundante, como
corresponde a un omnívoro, aunque esta abundancia no va pareja en absoluto con
el conocimiento que tiene la gente de campo de él, ni a las veces que lo
veremos en libertad pues es casi totalmente nocturno. En verano sale un poco
antes de anochecer y se recoge poco después de amanecer. Son poco activos con
la lluvia y más con el calor (no excesivo) que con el frío. Parece ser que las
noches muy luminosas sale más tarde, camina más despacio y se recoge antes. En
las zonas muy frías los tejones se recogen en la tejonera durante las
temporadas más duras. Se le considera un animal de costumbres fijas y muy
escrupuloso en la limpieza. La mayor parte de su actividad la realizan en poco
más de un kilómetro cuadrado. Miope por naturaleza, no distingue bien una
figura quieta, con lo que se puede estar delante de él sin que se percate de tú
presencia, mientras no le llegue tu olor. Tiene, a falta de buena vista, un
olfato y oído muy desarrollados.
Es muy desconfiado y a
la mínima señal de peligro fuera de la tejonera no saldrá.
El celo lo tiene entre
marzo y agosto volviéndose muy activo. Aunque en la tejonera vivan varios
juntos cada uno se busca la vida por separado. Es un animal aparentemente
torpe, un amigo estuvo encorriendo a uno durante un buen trecho a lo largo de
un prado (Canfránc, Huesca) y lo alcanzaba con cierta facilidad, pero cambia
radicalmente si se ve en peligro. Es muy conocido el tejón americano que le
hace frente a los pumas e incluso les roba la comida. Parece ser que sus
poblaciones están en leve retroceso, aunque es un animal muy abundante. Y
también hay quien lo ha visto enrollarse como un ovillo y dejarse caer rodando
ladera abajo para escapar, ya que no es precisamente un atleta y su velocidad
punta es bien pequeña.
Normalmente suele
emitir unos gruñidos parecidos a los de un cerdo.
Excrementos
Los excrementos son generalmente cilíndricos y muy uniformes resultando romos en los dos extremos, o levemente en punta por uno, aparecen doblados o partidos. Miden 2-3cm de diámetro por una longitud muy variable siendo algunos bastante grandes, hasta 15cm. A menudo son fofos o deformes. El contenido puede ser cualquier cosa. Casi siempre son de color negro o marrón-grisáceo. Poseen un olor característico, no muy fuerte ni intenso.
Ubicación
No los utiliza para
marcar el territorio a pesar de lo llamativo de su ubicación. Aunque sí podrían
realizar éste actividad según algún autor, o por lo menos algunas de las
letrinas. Sí se ha comprobado que depositan más excrementos en las letrinas
cercanas a la tejonera durante la época de los partos, febrero, dejando de
defecar en estas letrinas al llegar la primavera. Para depositarlos excava
previamente pequeños cuencos de 10-15cm de diámetro, aproximadamente por 5-10cm
de profundidad y no entierra las heces. En alguna rarísima ocasión se ven los
excrementos directamente sobre el suelo, pero aprovechando alguna pequeña
depresión.
La mayoría de las
veces hay varios agujeros juntos, encontrándose uno o varios excrementos en
cada uno de ellos o incluso alguno o varios vacíos. Algunas de estas letrinas
están relacionadas con la tejonera. Muy rara vez las excava al aire libre,
procurando, más o menos, utilizar lugares al abrigo de ramas bajas de árboles,
entre la hierba alta, arbustos, etc. A menudo las coloca a la orilla de pistas
o caminos.
Características principales
El estar ubicados en sus característicos agujeros o huecos del terreno.
Letrinas sin escarbar
Aquí aprovechó una hura de conejo
Huellas
La huella de este mustélido es inconfundible con ninguna otra. Como animal excavador que es tiene unas desmesuradas extremidades en relación a su tamaño. Manos y pies son de gran tamaño, motivo por el que deja buenas impresiones, aunque poco profundas, incluso en mal sustrato. Sus huellas se salen de la norma, al igual que las de la nutria, del resto de mustélidos pareciéndose más a un osezno que a una garduña.
La mano consta de cinco dedos, una almohadilla principal y dos más pequeñas. La almohadilla principal es bastante grande y compacta. El quinto dedo no lo marca en muchas ocasiones. El lóbulo del talón es más pequeño, 1cm y está claramente separado hacía atrás quedando impreso en raras ocasiones o cubierto por el pie. El segundo lóbulo se encuentra cercano a la almohadilla principal y al dedo pequeño y prácticamente nunca queda impreso. Las uñas de la mano son desmesuradas llegando a medir 3cm, motivo por el que rara vez no quedan marcadas. El pie es parecido a la mano, pero carece de los lóbulos del talón y las uñas son de menor tamaño, 1,5cm.
Las almohadillas principales de pies y manos quedan a menudo mal impresas en la parte trasera; entonces la forma y posición de los dedos, los 4 principales casi a la misma altura, junto con las uñas son suficientes detalles para clasificarlas correctamente.
Una huella deformada en barro blando puede confundirse levemente con la de un perro.
Características principales
Sus grandes uñas y la forma rectangular del conjunto.
Alimentación
Es un amante de la
miel para lo cual desentierra todos los panales que se encuentra a su paso
dejando un buen agujero, muchos insectos muertos y pocos restos del panal.
No resultara fácil
clasificar esta actividad pues también la deben desarrollar el zorro, el oso o
el jabalí. Desentierra a menudo nidos de ratones y topillos en busca de camadas
o almacenes, dejando los restos esparcidos alrededor. Escarba cados de conejo
en busca de gazapos. Labores estas que también lleva a cabo el zorro o el
jabalí.
Aprovecha las épocas
en que los anfibios son abundantes, pero sabe que los sapos son indigestos, así
que, cuando caza alguno lo despelleja, dejando el esqueleto más o menos
completo y con la piel enrollada sobre la cabeza, si es que ésta aparece. (ver
zorro y nutria). En algunas zonas la lombriz de tierra es una parte importante
de su alimentación, especialmente en determinadas épocas. Las desentierra de
una en una dejando pequeños agujeritos de hasta 12cm de ancho, algo más largos
y de una profundidad variable alrededor de estas medidas. No es fácil
diferenciarle en esto del zorro, que también realiza abundantemente esta labor,
aunque no para buscar lombrices, pero en general el tejón hace estos agujeros
algo mayores y el fondo se aprecia casi tan ancho como la boca, mientras el
zorro deja el fondo casi en pico al tener las manos mucho más pequeñas, aunque
esto no siempre se aprecia.
Un detalle curioso es
que un animal con estas uñas estas queden muy marcadas en las escarbaduras,
pero la realidad es que resulta raro verlas, por el contrario lo que suele
dejar es una parte alisada dando la sensación de ser de jabalí.
Aquí buscaba cangrejo americano
Estos agujeros se pueden presentar aislados o en grupos. En otras ocasiones sus rastros se confunden con los del jabalí cuando se trata de desenterrar bulbos o raíces. Entre jabalí y tejón existen apreciables diferencias en el resultado de esta labor pues, mientras el primero hoza con la jeta moviéndose constantemente y apartando la tierra en todas las direcciones, el segundo lo hace con sus manos apartando la tierra hacia un lado. La tierra sale esparcida por detrás del animal mientras la parte en que a clavado las manos está cortada a pico y alisada, y rara vez con señales de las uñas. Aprovecha los tocones secos pues en ellos encuentra abundantes gusanos. Esto también lo hacen otros mamíferos.
http://escarbaduras.blogspot.com/
Los prados donde pacen las vacas acaban convirtiéndose en una despensa de escarabajos coprófagos que explotan distintos animales, y uno de ellos es el tejón. En los maizales tumba las plantas en busca de las mazorcas, como el jabalí. Las huellas nos darán al autor.
Otros rastros
Le gusta bañarse,
embarrarse y rascarse contra rocas o troncos dejando adheridos algunos pelos,
aunque esto no es muy usual.
Tampoco es muy común encontrar las marcas de sus uñas en un tronco. Cuando es una corteza lisa se puede observar con claridad las marcas de las uñas., al tenerlas tan gruesas no es posible confundirle con animales de uñas finas como el gato y la altura a las que las hace, hasta 1 metro del suelo, unido a la distancia entre las uñas le diferencia del oso.
Guaridas
Hablar del tejón es,
invariablemente, hablar de características peculiares, también en relación a su
guarida, la tejonera. Es aquí donde las desproporcionadas manos cumplen su
verdadera función, la de excavar galerías subterráneas que son agrandadas
generación tras generación alcanzando cientos de metros de galerías, decenas de
bocas y sacando al exterior toneladas de tierra. En Inglaterra se encontró una
con ochenta bocas.
Llegan a cambiar la
fisonomía de la zona. La mayoría de las
bocas no se usan y aparecen cubiertas de telarañas o vegetación. En las grandes
tejoneras pueden convivir varias especies de animales a la vez o ser usadas
individualmente por animales distintos al tejón: lince, lobo, conejo, gato,
etc. Por lo que cada boca puede tener la marca de excavar distintiva de cada
uno. Principalmente, elige terrenos con arbustos frente al bosque o zonas
abiertas. En ocasiones escoge conejeras y las agranda. Las bocas suelen ser más
anchas que altas, alrededor de 30-40cm. En la salida deja clarísimamente
marcado un profundo surco por donde ha sacado la tierra, detalle que le
diferencia de la zorrera. A menudo elige taludes y prefiere las caras norte o
este frente a las otras. La cama, dentro de la tejonera, está cubierta de hierba
seca que debe ser cambiada periódicamente, sacando la vieja y esparciéndola en
el exterior. Los tejones disponen de varias tejoneras en su territorio así como
distintos huecos entre rocas, troncos, etc. A veces pueden ser pequeños
recovecos con una cama de hierba. En un roquedo es posible encontrar camas de
tejón y garduña, la diferencia es que el tejón es mucho mayor con un buen
colchón de hierba, en el centro la hierba aparece aplastada con un diámetro de
30-40cms, la presencia de pelos puede ser importante.
Cambian a menudo de
lugar de encame e incluso de compañeros.
En menor medida que el zorro también el tejón acampa fuera de las tejoneras al abrigo de la vegetación espesa, en lugares humanizados suelen ser cañaverales y zarzales, y le gustan especialmente los roquedos, en los agujeros será posible encontrar sus camas.
Esta tejonera es una rareza, tanto por lo expuesta que está, como por el árido entorno donde está. Aquí es escasísimo el tejón, pero tiene una explicación, la foto de arriba está hecha desde la orilla de campos de maíz, donde el tejón se alimenta de maíz y lombrices principalmente